Decisión
Jerónimo no había podido dormir bien.
Una fría neblina llegaba desde la bahía atravesando los bosques.
Se apresuró a cerrar la ventana de su dormitorio y bajó al comedor para desayunar.
Sus hermanos habían pescado toda la noche y acababan de llegar. Medio dormidos contaron la aventura que impactó tanto al joven quien movió la cabeza, sonriendo y sudando.
El no participaba de esas correrías nocturnas y esperaba la madrugada para oír el relato de lo que, para él, era inalcanzable.
Fue tan emocionante saber que en la playa estaban las ballenas, que olvidando su ceguera dijo: muy bien, entonces, llévenme a verlas.
Mixtura
Salió precipitadamente de su casa.
Casi atropella al hombre que había soñado anoche.
Se disculpó. El también. Quedaron mirándose.
Se reconocieron. Sus manos se unieron y se encontraron en un profundo abrazo. Era él.
La calidez de esa mirada confirmó que su hermano desaparecido estaba con vida.
Francisca llevaba en su esencia las ansias de superar su fealdad. El estudio y su profundo anhelo, la ayudaron a triunfar.
Fue un logro sin par ese cambio que llegó a seducir al codiciado profesor.
Te pregunto: ¿Fue la constancia de tus actos lo que produjo el renacer?
¿Fue el destino? ¿ O tu afortunado cambio de crisálida a mariposa?
No responde.
¡Sé feliz! El mundo dejó de ser martirio y te pertenece.
Estoy sentada al borde de un barco
que se ha hundido en un remolino devorador.
Viajo por siglos, entre medusas, unicornios
Y sirenas.
Con profunda visión de futuro espero la marea
que nos haga reflotar y ver esa luna,
no fija en el firmamento- que siempre
le reproché- sino danzante gozosa por
los espacios celestes.